Polémica desató este jueves la congresista fujimorista Martha Hildebrandt en el Congreso por acudir al inicio de la última legislatura con un pin de oro en el pecho con el 4, número con el que postula a la reelección.Consultado al respecto, el presidente del Legislativo sostuvo que se emitirá una circular para recordar a los congresistas que, por ley, no se puede usar ningún tipo de distintivo relacionado con la campaña electoral dentro del Parlamento.
“Como ella (Hildebrandt) no está en todas sus condiciones para conducirse, pareciera que no ha se dado cuenta (de la falta que ha cometido)”, indicó el aprista, tras añadir que este tipo de casos se ven en la Comisión de Ética, pero hay un detalle: dicho grupo lo preside precisamente Hildebrandt, quien sería eventualmente ‘juez y parte’.
Es más, algunos colegas de su propia bancada no vieron con buenos ojos la actitud de Hildebrandt, y le pidieron que se sacara el pin, pero esta ni se inmutó, mientras que el legislador Raúl Castro (PPC) sostuvo que se trata de una falta ética. “No se puede usar los recursos del Estado para hacer propaganda”, refirió.
Para ser altanera no hay quien le gane
sacar excusas que se duerme porque el parlamento aburre es buena,
que ella admire a un japonés rata hace que me desbande
por eso cobra gastos de instalación aunque no deba,
y todos le besan los pies aunque los insulte ella.
Es que es erudita y por eso la admiro, dicen,
es un privilegio tenerla en el Congreso, aclaman,
miserables deben ser sus vidas de estos admiradores
pues en materia de educación y ética, nada hizo ¡perdedores!
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